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Consigue un abdomen de acero

Consigue un abdomen de acero

Conseguir un abdomen de acero es un trabajo que conlleva tiempo, pero la constancia y el compromiso
son necesarios para lograrlo. Si quieres saber cómo conseguirlo… ¡Sigue leyendo!

¿Cómo conseguirlo?


Si este es tu propósito debes tener en cuenta que es un proceso largo, un gran desafío… pero los
resultados son increíbles. Merecerá la pena el esfuerzo.
Contrario a lo que la gente piensa, no necesitarás hacer abdominales todos los días, ni tendrás que
pasarte largas horas entrenando. Simplemente con introducir pequeñas pautas en tu día a día
conseguirás el objetivo que tienes en mente.

Paciencia y constancia


Partiendo de la idea de que es un proceso largo, que no se consigue de la noche a la mañana, deberás
tener calma. El abdomen es una de las zonas más difíciles para reducir el porcentaje graso y llegar a
conseguir el famoso ‘’six pack’’. Deberás tener paciencia y saber que conlleva tiempo y esfuerzo para
querer conseguirlo.

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Sáltate los abdominales tradicionales


Durante mucho tiempo se creía y confirmaba que los abdominales ‘’de toda la vida’’ eran el único
camino para conseguir un abdomen fuerte. Actualmente esta afirmación se desmiente, sabiendo que
toda la zona abdominal abarca mucho más que la flexión de tronco (el típico ‘’crunch’’ abdominal)
En lugar de esto, céntrate en realizar ejercicios en los que todo el cuerpo trabaje. Con este tipo de
ejercicios no sólo ahorras tiempo al trabajar múltiples partes del cuerpo incluyendo el abdomen, sino
que también estarás trabajando en mejorar tu postura para que el abdomen pueda desarrollarse sin
implicar dolor a otras zonas, como la espalda por ejemplo.

Bebe más agua


Aumentar el consumo de agua en tu día a día te ayudará a limpiar tu organismo por dentro. Reducirás
esas sensaciones de hinchazón y a la vez conseguirás acelerar un poco más tu metabolismo,
aumentando así la quema de grasas. Añade fruta a tu agua para darle más sabor; bebe infusiones
después de tus comidas para hacerlas un poco más ligeras; o incluso zumos y batidos de frutas,
añadiendo además vitaminas y minerales a tu bebida.
Mejora tu alimentación


La afirmación de que ‘’los abdominales se hacen en la cocina’’ es en parte cierta. Cuidar lo que comes
es igual de importante que trabajar por lo que quieres. Incorpora fruta y verdura en tus comidas. Evita
los ultraprocesados, no abuses muchos de ellos, contienen muchas calorías además de no aportar
calidad nutricional. Introduce alimentos que te sacien (como la avena) así como aquellos que sean ricos
en fibra.

No le temas a las grasas


Para perder grasa, necesitas perder grasa. Sí sí, como lo oyes. Debes incorporar ácidos grasos
monoinsaturados en tu dieta (aguacate; frutos secos; aceite de oliva…) controlando sus cantidades.
Aunque suene contradictorio, te ayudarán a perder grasa, así como darte multitud de beneficios a tu
sistema.

Controla las porciones
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Aplica un método de cantidad bien definido que te ayude a no comer más de lo que necesites
manteniendo tus necesidades nutricionales. Consulta siempre qué cantidades son las necesarias
dependiendo del alimento y no te arriesgues a comer menos de lo que deberías.
Ojo: Si tu objetivo es perder peso o bajar grasa, no necesites comer menos cantidad, sino mejorar en la
calidad.


Incluye proteína en tus comidas


Tener un buen porcentaje de músculo es igual a salud, mejorando así también tu tono muscular, de
manera que el cuerpo se sienta más fuerte y se vea más fuerte. Alimentos que contengan alto
porcentaje en proteína (carnes bajas en grasa; huevo; lácteos; legumbres…) te ayudarán a conseguir tu
objetivo, favoreciendo así la pérdida de grasa.

Realiza planchas


La plancha es el ejercicio más completo para trabajar toda tu zona abdominal. Esa postura abarca toda
la musculatura, incluyendo también tus brazos y piernas. Existen muchas variantes de este ejercicio,
tanto estáticos como en movimiento. Combinar y alternar estas variantes te ayudarán a alcanzar antes
tus objetivos, de manera que puedas realizar un trabajo cada vez más intenso y progresar cada vez
más.

Ahora que ya sabes todo lo que puedes hacer para conseguir un abdomen fuerte sólo tienes que
ponerlo en práctica. Y recuerda, caer en el intento no significa que tengas que volver a iniciar desde

cero. Cada pasito cuenta, y avanzando poco a poco llegará mucho más lejos.

¡Nosotros nos encargamos de ayudarte a ello!

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